Lengua y traducción gastronómicas: vehículos de culturas por Teresa París Pombo
Hasta ahora, tanto la traducción gastronómica como la literatura gastronómica se han clasificado como especialidades menores. En muchos casos, ni siquiera se consideraban una especialidad como tal, sino como una parte integrante de la traducción turística o de otro tipo de literatura como la policiaca o la erótica.
En estos últimos años, la afición por el arte del buen comer y el buen beber (a fin de cuenta de eso trata la gastronomía) además de ganar terreno, ha adquirido un innegable protagonismo como elemento de la vida cotidiana, atractivo turístico, reclamo social, actividad cultural y fuente de ingresos económicos.
Por consiguiente, se ha vuelto un motor de intercambio entre diversas sociedades, culturas y sistemas lingüísticos. En este auge inciden la atención a una dieta equilibrada y sana, un moderno enfoque epicúreo de la vida, la mayor frecuencia de los viajes y la tan nombrada mundialización. Todo ello a su vez repercute en un desarrollo acelerado de la industria alimentaria y de las normativas nacionales e internacionales conexas.
Con todo, la traducción gastronómica o culinaria sigue siendo una de las especialidades más ignoradas en el ámbito de la traducción. Cualquier persona con algunos conocimientos de cocina e idiomas puede pensar que posee las competencias necesarias para la realización de traducciones culinarias. Se trata, sin embargo, de un grave error ya que este ámbito exige, a menudo, un ingente trabajo de adaptación para el cual es indispensable conocer no solo los idiomas concernidos sino también los contextos culturales del prototexto y el metatexto. Es entonces cuando el traductor gastronómico adquiere carácter de mediador cultural cuya labor traspasa el simple trabajo de traducción.
Las anécdotas relativas a las traducciones de cartas de restaurantes son numerosas y, a veces, sorprendentes. Hace poco, por ejemplo, en un restaurante de Beijing, los turistas podían encontrar entre los platos propuestos el «pollo sin vida sexual» (en realidad traducido al inglés como chicken without a sex life). Se trataba de hecho del tongziji(picantón – pollo con un peso inferior a 650g – que literalmente llaman “pollo virgen”) y que en inglés se llamaría spring chicken(cuya traducción literal al español “pollo de primavera” también podría prestar a confusión) y en francés se traduciría por coquelet(lo mismo pasa en este caso pues hablaríamos de “gallito”).
En un restaurante de Canarias proponían en su carta raciones de brave dads(“papas bravas”), y en otro las “criadillas de tierra” se habían traducido por petites créatures de la terrees decir “pequeñas criaturas de la tierra”.
Si bien estos errores no dejan de ser divertidos cuando se cuentan como anécdota, lo más probable es que resulten, como poco, desconcertantes para el lector.
Aunque traducir una receta, una carta, una guía, un menú, una novela, una página web o cualquier otro tipo de publicación en el ámbito gastronómico pueda implicar una problemática muy diferente, existen, no obstante, determinados aspectos comunes que es esencial tener en cuenta y que se pueden aprender.
Programa:
9, 16, 23 Y 30 de noviembre de 2019
De 10:00 a 14:0
Sábado 9 de noviembre: Historia y lengua de los recetarios
10:00 – 11.15 Historia de los recetarios
11:15 – 11:30 Pausa para café o agua
11:30 – 13:00 Contenidos de los recetarios
13:00 – 13:30 Ejercicio práctico: elaboración de un texto gastronómico
13:30 – 14:00 Debate en torno al ejercicio práctico
Sábado 16 de noviembre:La terminología y las implicaciones culturales en la redacción y traducción de recetarios
10:00 – 10:45 Los recetarios reflejo cultural de épocas y culturas a través de la lengua y sus contenidos
10:45 – 11:30 Terminología
11:30 – 11:45 Pausa para café o agua
11:45 – 13:00 Traducción, localización o translación cultural
13:00 – 13:30 Ejercicio práctico: translación terminológica y cultural de una receta exótica del español latinoamericano al español peninsular.
13:30 – 14:00 Debate en torno al ejercicio práctico
Sábado 23 de noviembre:Historia, géneros y lengua de la literatura gastronómica
10:00 – 11:00 Historia y geografía de la literatura gastronómica
11:00 – 11:30 La lengua de la literatura gastronómica
11:30 – 11:45 Pausa para café o agua
11:45 – 13:00 Géneros predominantes en la literatura gastronómica (costumbrista, policiaco, romántico-erótico, informativa, de viajes)
13:00 – 13:30 Traducción de un texto correspondiente a uno de los tres géneros (a escoger el género que prefieran) EN; FR -> ES
13:30 – 14:00 Debate en torno al ejercicio práctico
Sábado 30 de noviembre:La traducción y la terminología de la literatura gastronómica, pasado, presente y futuro
10:00 – 11:00 Historia de la traducción de la literatura gastronómica
11:00 – 11:45 La gastronomía en el cine y su lenguaje
11:30 – 11:45 Pausa para café o agua
11:45 – 13:00 Obras de la literatura gastronómica traducidas y técnicas utilizadas: exotización, domesticación, transposición, etc. aplicadas a obras de Rabelais, Brillat Savarin, McGee, Giesbert, Montalbán, Camilleri, Leon, Giesbert, Allende, etcétera.
13:00 – 13:30 Análisis de la redacción o traducción de un texto gastronómico
13:30 – 15:30 Comida tertulia de despedida
Regalo de un cuadernillo de recetas mexicanas adaptadas a España.
DURACIÓN: del 9 al 30 de noviembre de 2019
FORMATO: los sábados
HORARIO: de 10:00 a 14:00
PRECIO: 240€ más 30€ de matrícula nuevos alumnos. Si se realiza conjuntamente con el Curso-taller de traducción médica para traductores literarios por Fernando A. Navarro el precio por ambos será de 440€. (5% de descuento a socios de ACE Traductores y Asetrad).