El tratamiento del tiempo 1: La deceleración
Cuando escribimos, seamos o no conscientes de ello, creamos una ilusión de temporalidad. Es decir, abordamos un periodo de tiempo real (TR) y lo desarrollamos en un espacio narrativo (TN). La deceleración es la técnica de tomar un periodo de tiempo real muy breve (TR), y desplegarlo en un amplio espacio narrativo (TN). El resultado es que la situación narrada parece ralentizada, desplegada, estirada. Imaginemos, por ejemplo, que ocupamos una página entera en narrar el intervalo de un beso, como hace Cortázar en un memorable pasaje de Rayuela. Para decelerar una breve situación narrativa debemos echar mano a la descripción y el análisis. O sea, describir minuciosamente o analizar el hecho que estamos narrando.
Conceptos clave: Descripción, análisis, tiempo, ralentización.
Ejercicio: Parte de una situación real breve: tu personaje sube a un caballo, o el acto de besar, o el acto de comprar una figura de porcelana, o cualquier otra, pero que sea muy breve. En lugar de decir, por ejemplo, ‘Montó a caballo’, intenta que dicha acción ocupe al menos media página. Para ello debes detallar los gestos, describir los movimientos, analizar el significado de dicha acción para el personaje. Habrás conseguido crear una deceleración narrativa: has hecho durar narrativamente algo que pudo enunciarse en menos de una línea.
Ésta y muchas otras técnicas narrativas son desarrolladas como conceptos teóricos en nuestros talleres de novela, relato, literatura de viajes, y son un elemento en el que ponemos especial interés en nuestras asesorías personalizadas. Porque si algo consigue un taller es ahorrar tiempo: el análisis y entrenamiento en diversas técnicas narrativas crea las habilidades necesarias para que el escritor avance de manera rápida y eficaz en sus proyectos, evitando bloqueos, caminos equivocados, y callejones sin salida. Llevar a feliz término un relato, novela o blog de viajes, depende en gran medida del dominio técnico alcanzado por el escritor. A escribir se aprende leyendo y escribiendo: entrenarse es la clave.